Foto: Barbara |
La
inspiración es atribuida a lo Divino.
Es una
sensación etérea que llega a quien
canta, a quien escribe, danza, pinta ... Toda persona sensible es capaz de
percibir la dimensión de lo eterno.
Más allá de
uno mismo, buscamos la certeza. Las obras de arte inspiradas preceden el futuro evolutivo y se
apoyan en un pasado remoto, mientras coexisten con el presente sin forma.
El arte sugiere la esencia de lo interior, el despliegue creador
del individuo como receptor y emisor de fuerza que transforma lo irreal en auténtico: la búsqueda de fundamentos sagrados.
Los humanos se preguntan: “¿Cuál es mi esencia?”
¿SER? ¿Energía? ¿Felicidad?
Quizá, todo ello y más.
Escucha el sonido del Mantra...
Escucha el sonido del Mantra...
SAT CHIT ANANDA...
OM…